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Si hay algo que caracteriza a la ciencia económica moderna es la adopción de lo que podríamos denominar en sentido amplio positivismo como guía de investigación y criterio para la construcción de las teorías económicas. La creciente influencia del positivismo tiene su origen en el intento de querer que las ciencias sociales imiten a la ciencia exitosa por excelencia: la física (newtoniana). Para el positivismo la tarea de la ciencia económica debe ser el realizar predicciones correctas. Debe juzgarse, por tanto, según la precisión, el alcance y la conformidad con la experiencia de sus predicciones, de la misma manera que con cualquier otra ciencia física o natural. Las hipótesis y premisas son totalmente irrelevantes para la validación de las teorías económicas, puesto que éstas han de juzgarse en términos de su valor instrumental a la hora de generar predicciones exactas. Mises señaló que la raíz de los problemas de la metodología positivista era el defender un monismo metodológico. Es decir, proclamar que los métodos experimentales de las ciencias naturales constituyen la única forma adecuada de investigación. Según el austriaco, el método que se utiliza para abordar y resolver los problemas a nivel científico varía si se trata de las ciencias naturales o de las ciencias sociales (ciencias de la acción humana) debido a que existen dos reinos de cosas: el reino de los objetos físicos y el reino de la acción. Por tanto, el sistema para aproximarse e interpretar los fenómenos y construir las teorías debe ser diferente debido a la distinta naturaleza del objeto que estudian. A esto se denomina dualismo metodológico. El artículo de Milton Friedman titulado “La metodología de la economía positiva” sigue siendo la justificación filosófica más importante del positivismo. El más claro enunciado de la posición positivismo a juicio de Buchanan. Pues bien, el principal objetivo de este trabajo es hacer una crítica a la metodología positivista que Milton Friedman propone para la ciencia económica en su artículo. Todo ello desde la perspectiva de la praxeología de Ludwig von Mises.