Desperté cuando el amor acariciaba mi alma

Que la vida es como un baile no lo descubre nadie, sólo hay que mirar a nuestro alrededor y en nuestro interior. La vida es una danza de mil gestos ¿Pero bailamos solos? ¿Bailamos con quien queremos? De eso trata la historia de Marinieves Garabal. Trata de lo que buscan las buenas historias, trata de encontrar esos rincones y esquinas del alma donde es tan difícil llegar. Trata del amor, pero no del amor lleno de tópicos sino de la piel, del amor que ríe y sana, del amor que duele y nos enferma, del amor de la amistad y del amor de quien nos acompaña. Tras el éxito de su primera novela “El valor del silencio”, Marinieves Garabal vuelve a los lugares donde explotan las historias que son, ni más ni menos, los lugares comunes, nuestras galaxias más próximas. Tres amigas, tres historias que se cruzan y entrelazan en una madeja inquietante y absorbente. Al final todo está conectado por el hilo invisible de la vida, un hilo que desenreda Marinieves de forma natural y fluida, como si tuviera en sus manos el poder del tiempo, que es quien nos hace regresar siempre e inexorablemente a la verdad.